UN ENCUENTRO 10 PARA CELEBRAR EL 10° ANIVERSARIO DE NORAI
El domingo 28 de mayo tuvo lugar un encuentro único: por primera vez se convocó al conjunto de los residentes de los pisos Norai. El 10° aniversario de la Asociación está posibilitando tener encuentros diversos y esta vez fue el Programa de Vivienda quien tomó la iniciativa.
El camino de la Fraternidad es largo y difícil. Necesita "puntos de amarre" (eso es Norai), lugares de encuentro y vida donde consolidar cotidianamente esos vínculos que, respetando nuestras respectivas culturas y tradiciones, nos permitan establecer relaciones cercanas y fraternas.
Procedentes de lugares tan diversos como Mali o Ucrania, Venezuela o Rumanía, la tarde nos dispuso en una circularidad, que a nadie daba protagonismo pero a todos nos visibiliza únicos y unidos. Después de una breve presentación, que puso en evidencia nuestra diversidad, nos fuimos entrelazando y hermanando por medio de una red solidaria y simbólica. Cada día es el momento oportuno para acercarnos e interesarnos por el otro.
Nos dimos un tiempo para bucear en los fundamentos de Norai, para conocer de qué modo se han ido haciendo realidad las intuiciones fundamentales plasmadas en los Estatutos que, según nos decía Zernin, el Secretario de la Asociación, son una inmensidad que se convierten en envío y misión.
No es tiempo para la indiferencia, las dificultades para acceder a una vivienda digna nos muestra que hay mucho por hacer. Multitud de personas no encuentran un lugar digno donde vivir, un@s compañer@s con quienes sentirse en familia.
Esta celebración de los 10 años de Norai se convirtió en un punto de encuentro y de partida. El canto de aniversario "Estas son las mañanitas" nos situó ante lo que está por venir, un mañana laborioso y prometedor, que nos requiere comprometidos y hermanados.
Las mesas se llenaron de platos exquisitos de los diversos países, una parábola de esa mesa generosa donde todos aportan lo mejor suyo y nadie se siente excluido de esa gran familia.
Fue un encuentro breve y simbólico, expresión de ese lugar de amarre donde celebrar la alegría de una humanidad reconciliada. Faltó el baile pero, será para la próxima convocatoria. Felicidades a todos.